Feria del Libro de LIMA -- 2013 -programa --Diego Trelles Paz
El lunes en la revista VELAVERDE, aparecieron las declaraciones de la directora de la FIL, Doris Moromisato, en respuesta a los cuestionamientos por la injustificable alza en el precio de la entrada. VELAVERDE citó el post de mi autoría (aparecido en este muro) y también me llamó para entrevistarme.
Estas son las respuestas de Doris:
1. Efectivamente la feria costará 4 soles, pero aún así es la más barata de la región: "En las FIL Bogotá, Buenos Aires, Guadalajara y Santiago de Chile el precio de ingreso oscila entre US$ 2 y 3.50"
2. A diferencia de otros países, la feria limeña no recibe apoyo estatal y debe financiarse con auspicios y el alquiler de los stands. Cada año se invierte en toldos, alfombrado, cercos, decorado, baños.
3. Dice Moromisato que no llegan escritores de renombre a Lima porque no es una plaza de interés para ellos. La razón, asegura, es que sus libros se venden muy poco acá.
4. Finalmente dice que no tomará en cuenta críticas de "la gente que habla ferozmente de cómo se deben hacer las ferias, pero que no se les conoce ni la organización de una kermesse en su cuadra (...) Yo los llamo 'los eunucos de la cultura' dicen que saben cómo se hace una feria del libro, pero no tienen con qué"
Voy a empezar contando una de las tantas anécdotas de la curiosa Cámara Peruana del Libro que dirige Doris Moromisato. Este año fui invitado por ellos para participar en la FIL Trujillo presentando mi novela BIOY. Dijeron que me pagarían el pasaje y la estadía. Acepté. Sin embargo, a diferencia de otros escritores, no estaban dispuestos a pagarme un pasaje en avión (algo que habría aceptado sin problemas si todos los escritores hubiéramos ido en bus, claro). Me negué. Ahí quedó la cosa. Luego, sin embargo, fui invitado por Petroperú a la misma feria para presentar el libro de los Premios Copé de Cuento (premio en el cual fui uno de los jurados). Acepté. Petroperú me pagó el pasaje y la estadía. Mi presencia en Trujillo estaba destinada únicamente a la presentación del libro de Petroperú. Sin embargo, cuando llegué me di con la sorpresa de que, unilateralmente, sin siquiera decirle a Planeta, la CPL había programado la presentación de BIOY en la Feria. Es decir: había aprovechado que Petroperú había pagado el pasaje en avión (que ellos no habían querido financiar) y había colocado el evento en el programa. Cuando entré a la Feria, ya había un auditorio de gente esperándome cortesía de la criollada de la CPL.
Este es solo un pequeño ejemplo de la manera autoritaria y nebulosa con la que se viene manejando esta institución desde hace mucho. Si uno reclama, lo primero que dirán es que es una institución privada con sus propias reglas: no le deben ninguna explicación a nadie (no ha dicho Doris que no responderá a nadie hasta después de la Feria?). Resulta curioso sin embargo que ahora ella misma se queje de que no hay ayuda del Estado: en qué quedamos entonces? O solo es una institución privada cuando les conviene?
Si las Ferias de Buenos Aires, Guadalajara, Santiago de Chile y Bogotá cuestan más es porque son Ferias serias, donde trabaja gente seria que lee y se informa antes de elaborar un programa medianamente decente para sus ciudadanos. Profesionales a los que jamás se les habría ocurrido traer a un tal Luis Corbacho para inaugurar sus eventos. Es una simple cuestión de sentido común.
La parte más curiosa de la respuesta de Doris es que diga que Lima no es un plaza de interés para "escritores de renombre" porque aquí no se venden sus libros.
Bastaría recordarle que al Perú en los últimos quince años han venido el Premio Nobel José Saramago, Claudio Magris, Rubem Fonseca, Enrique Vila-Matas o César Aira y que sus presentaciones estuvieron repletas de gente? Sería conveniente señalarle que cuando la Feria costaba un sol teníamos juntos a autores como Diamela Eltit, Carlos Monsivais, Mempo Giardinelli, Alan Pauls y Héctor Abad? De repente refrescarle la memoria con los nombres de los críticos Terry Eagleton o Tzvetan Todorov que llegaron a Lima no hace mucho gracias a la Católica? Qué tal si hablamos de poetas como Ledo Ivo, Carlo Bordini, Jotamario Arbláez, Jacobo Rauskin, Juan Carlos Mestre (dos veces!), Thomas Boberg? Y qué tal si nos remontamos a esa Feria en la cual Fernando Vallejo se negó a venir porque no quisieron pagarle el pasaje en avión que les había pedido?
Las excusas que da Doris Morimisato para justificar el alza en el precio y la notoria pobreza de este Feria son realmente lamentables. Que nos venga con el cuento de que la CPL solo saca para financiar la Feria para justificar toda la plata que les va a entrar con ese sol extra es abusivo. Que, además de todo eso, tengan la ocurrencia de hacerle un reconocimiento a una periodista Fujimorista que tanto daño le ha hecho a la democracia de este país y cuyo aporte a la cultura es nulo, es sencillamente insultante.
La Feria Internacional del Libro no puede seguir siendo organizada de esta manera.
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